Cuando una persona como tú piensa en establecer un negocio, tiene que visionar el alcance de su idea. Partiendo de donde te encuentras, necesitas proyectar, desear alcanzar lo que piensas. Para establecer la Visión de tu proyecto, tienes que proceder a mirar en una doble dirección:
- Hacia el Infinito
- Hacia tu interior
Cuando miras hacia el infinito, como en esta foto, al principio sólo ves las flores de la ilusión, que están en primer plano.
Después, poco a poco, observarás los cambios que pueden producirse en tu situación. Y la realidad, es que la lejanía no te permite perfilar los cambios con suficiente detalle y por lo tanto, aunque debes tener presente estos cambios, no deben paralizarte. Confía en que con tú ilusión y tesón conseguirás alcanzar las soluciones adecuadas en el momento oportuno.
Por otra parte, al mirar en tu interior, verás tus aptitudes o capacidades y podrás escribir (según tu actitud ante la vida), hasta donde deseas proyectarte. Este es el momento donde cada persona, propietaria de sus miedos y de sus alegrías, le da forma mental a su proyecto (su Visión). Hay personas, que ante las dificultades que ella misma visiona, detiene el Proyecto que desea y hay personas que se embarcan a la aventura de la vida, con la confianza de alcanzar sus sueños y proyectos visionados.
No lo olvides que solo tú te pones los frenos a tus sueños.
¡Tú eres el motor de la economía!